Una por una se han cumplido las expectativas que manifestaba en mi anterior entrada. El paro ha sido tremendamente significativo y la huelga ha sido un éxito a pesar de la lógica mala fama de la que los dos sindicatos mayoritarios tienen entre los trabajadores/as y de las presiones patronales.
La brutalidad de la reforma ha tenido más poder de convocatoría que las élites sindicales, la respuesta en las calles ha sido masiva a pesar de la fuerte campaña mediática y la represión policial contra los piquetes.
Durante los días anteriores a la huelga fueron significativos los llamamientos desde el movimiento 15M a imaginar otra huelga y tomarla, así como las convocatorias de huelga de consumo y huelga social. Otras iniciativas como el listado público de empresas que vulneran el derecho de huelga de sus trabajadores/as también han sido muy útiles. Finalmente, entre la indignación esta brotando de nuevo la conciencia de clase, y esto ha sido clave para el fortalecimiento de las convocatorias alternativas en forma de piquetes, manifestaciones de sindicatos minoritarios y bloques ( indignados, críticos, anticapitalistas o libertarios) en las manifestaciones oficialistas.
También ha habido unidad obrera a pesar de la división sindical. Por poner algún ejemplo de esto citaré el bloque crítico convocado por el 15M de Oviedo y secundado por l@s compañer@s libertari@s y anticapitalistas. La policía estableció un cordón entre este y la manifestación que fue roto por los manifestantes de ambos bloques resultando una persona detenida y apalizada por l@s de siempre. En medio del fuego en Barcelona, los bomberos de servicio que protestaban por la actuación de los mossos fueron dispersados con gases lacrimógenos y los mossos infiltrados en una manifestación tuvieron que salir huyendo cuando la multitud se les echó encima al descubrirlos agrediendo a un manifestante. Frente a la represión en los piquetes y las manifestaciones, esta unidad y solidaridad de clase han sido muy significativas a lo largo de todo el estado. Quien haya participado de alguna manera tendrá experiencias que contar a este respecto.
Pero esto es solo el principio, como dije en la anterior entrada. Ha sido una dura jornada de lucha que nos ha servido para darnos cuenta de cuant@s somos y cuales son nuestras fuerzas. El gobierno ha hecho oídos sordos y al día siguiente ha aprobado nuevos recortes. Seguimos perdiendo, pero la semilla del cambio ya está brotando. Ahora sólo hay que cuidarla. Es la hora de organizarse y defenderse, jornada tras jornada.
Ahora toca solidarizarse con l@s detenid@s y encarcelad@s.
ResponderEliminar